• Skip to primary navigation
  • Skip to main content
  • Skip to footer

Martin Checa-Artasu

Doctor en Geografía Humana

  • Formación
  • Publicaciones
    • Libros
    • Capítulos
    • Artículos
    • Artículos de difusión y participación en medios
    • Reseñas
    • Informes
  • Congresos
    • Organización de Congresos
    • Ponencias
    • Conferencias Magistrales
  • Docencia
  • Formación de RH
  • Proyectos
  • Reconocimientos
  • Blog

Exposiciones, Paisajes / 28 agosto, 2017

REFLEXIONES EN TORNO A LA 2a BIENAL NACIONAL DEL PAISAJE

articulo bienal nacional del paisaje

Acudo al Museo de Arte Carrillo Gil para observar la exposición de la 2a Bienal Nacional del Paisaje. Ésta es el resultado de una convocatoria artística convocada por el Instituto Sonorense de Cultura hace apenas un año. Es la segunda ocasión que dicha Bienal es acogida en dicho museo. A tenor de la folletería de la exposición se menciona que la convocatoria incluyó “una diversidad de prácticas artísticas: pintura, escultura, gráfica, fotografía, video, instalación, proyectos de intervención, sitio y performance, así como propuestas interdisciplinarias”. A cuenta de esas prácticas fueron recibidas 1146 piezas de 625 artistas mexicanos y extranjeros, y sólo se seleccionaron 43 obras. Se nos indica que entre el jurado hay un geógrafo, Federico Fernández Christlieb del Instituto de Geografía de la UNAM, editor a la limón con Ángel García Zambrano de Territorialidad y paisaje en el altepetl del siglo XVI en 2006 y dos personas vinculadas al mundo del arte contemporáneo y la curadoría: Patricia Mendoza, la directora de Suluz, fundadora del Centro de la Imagen y miembro del Consejo Mexicano de Fotografía y el curador en jefe del Museo de Arte Carrillo Gil, Guillermo Santamarina. Ellos son los que han otorgado los premios y menciones y han seleccionado las piezas.

bienal nacional del paisaje

El sapo de García. Roberto Ortiz Giacomán.

Volviendo a la exposición, el paisaje es, o eso parece, el eje conductor de la misma, entendido desde una posición multifacética y holística. Es todo o no es nada. Es entendido de forma explícita como implícita. Está en todas partes y el artista lo asume de distintas maneras según su percepción o según sus conocimientos. Y me parece que ahí radica uno de los problemas de algunas obras expuestas, nada tienen que ver con el paisaje. Son el entendimiento sui generis del artista de algo que con dificultad puede ser asumido como paisaje, tanto a nivel representacional como conceptual. No todo lo representado en esta exposición es paisaje, en todo caso es lo que la palabra paisaje provoca en la voluntad de creación artística de algunos.

bienal nacional del paisaje

Retrato sobre paisaje S/T,2. Goethe David Pontón.

bienal nacional del paisaje

El Coronel. Tizoc Santibáñez.

A pesar de ello, no son pocas las obras expuestas que destacan por la voluntad de indagar en torno al concepto del paisaje. Meritorias son las propuestas del coahuilense Roberto Ortiz Giacomán y su obra: El sapo de García. Una fotografía panorámica de unas montañas de México que recuerda a las imágenes captadas por Sebastiao Salgado y que busca que el espectador se meta en ese paisaje, lo huela, lo palpe y lo viva. La de Goethe David Pontón, titulada Retrato sobre paisaje S/T,2, con una imagen desgarradora de un niño pepenador absorbido por un cerro repleto de basura en Tultitlán, que muestra la brutal capacidad transformadora del paisaje y por ende del territorio que tiene el hombre y el papel que el arte tiene como elemento de denuncia. En la misma sintonía está la serie Anapra de Olivia Vivanco, tres imágenes que muestran en tres escalas distintas las marcas en un paisaje fronterizo y de paso entre Estados Unidos y México. La obra busca la reflexión, no exenta de crítica, de todo aquello que se esconde en el paisaje y que lo sitúa no como un elemento de valoración estética, sino ética. Mirando esas fotos no puedes evitar preguntarte: ¿Cuántas personas pasaron a Estados Unidos por ese lugar? ¿Cómo fue de difícil y sufriente ese paso?.

bienal nacional del paisaje

Serie Anapra. Olivia Vivanco.

Muy destacable es una de las obras ganadoras del certamen, la titulada El Coronel, firmada por el sonorense Tizoc Santibáñez. Una foto nocturna de una comunidad aledaña al cerro de El Coronel en Rosarito donde destacan ciertas casas iluminadas con farolas. Esta imagen más allá de su belleza nos explicita lo que el paisaje muestra y requiere de una indagatoria para entenderlo a cabalidad. Santibáñez nos aclara que esas farolas son pocas y sirven para iluminar una comunidad empobrecida que no cuenta con servicios como la energía eléctrica. De nuevo, la estética que vierte una narrativa a indagar oculta en el paisaje.

bienal nacional del paisaje

Residencias temporales 2014-2016. Armando Salazar.

bienal nacional del paisaje

Cerros pixelados con garbanzos. Juan Carlos Coppel.

En otras obras, el paisaje sirve como excusa para modelar reflexiones diversas. Y es ahí donde el arte contemporáneo puede aportar mucho a la relectura del paisaje y del territorio y a la necesaria reivindicación social de éste. Destaco tres obras. La instalación Cerros pixelados con garbanzos de Juan Carlos Coppel, una representación transliterada de unos cerros en tres dimensiones hechos a base de 100.000 granos de garbanzo. Es un paisaje artificial vertido en el suelo de un museo, lleno de crítica ante la pérdida de los cultivos de garbanzos en la región de los cerros de Sonora por culpa del cambio climático. Otra obra a señalar es la instalación Residencias temporales 2014-2016 del colombiano Armando Salazar. Paisajes artificiales en miniatura contenido en pequeñas botellas que encapsulan experiencias viajeras del propio artista. En este caso, esos paisajes embotellados nos remiten a la memoria frágil que se desvanece en el tiempo y que retiene algunos elementos que nos muestran los lugares visitados y vividos a manera de paisajes. Y la tercera es Tiempo y horizonte de Cecilia Hurtado es composición fotográfica que une a través de la línea del paisaje, en este caso una línea de cerros, tres imágenes distintas, hechas en distintos momentos y con diferentes personajes, niñas y jóvenes en este caso. Ese juego nos remite al papel trascendental del territorio como parte de la vivencia humana. Formamos parte de este y de sus paisajes y nos integramos vivencialmente al mismo inexcusable. Somos paisaje. Tanto es así que en nuestro transito vital caminamos por paisajes cambiantes por los efectos de la acción humana y del tiempo.

bienal nacional del paisaje

Tiempo y horizonte. Cecilia Hurtado.

Martín M. Checa-Artasu, Dep. Sociología, UAM-I.

Filed Under: Exposiciones, Paisajes

Footer

Coordinación de la Lic. de Geografía Humana
Dep. Sociología, Universidad Autónoma Metropolitana, Unidad Iztapalapa.
San Rafael Atlixco 186, Edif. H, 1er piso, H-163, Col. Vicentina, 09340, Iztapalapa, Ciudad de México.
Tel. 0155 1518 0134 | Cel. 045 55 3920 3491
martinchecaartasu@gmail.com | mcheca@xanum.uam.mx

Suscríbete y recibe mis artículos mensualmente.

2017 MARTIN CHECA - ARTASU. SITIO DISEÑADO POR LLUVIA DIGITAL | AGENCIA DE MARKETING DIGITAL.